sábado, 20 de enero de 2018

Loca Cordura







Veo, sonrío.
Cojo tus manos,
tomo al asesino.

Lloro, río.
Me apuñalas,
pactas mi sino.

Muero, desconfío.
Preciosas tus manos,
marcaron mi camino.










martes, 16 de enero de 2018

Rara navidad.



Siento que he matado a alguien,
tal vez he matado a mi propia conciencia.
Tal vez ella está muerta
y yo he sido mi propio asesino. 

Quizás ya todo cambió,
quizás ya nada volvió.
Quizás algo mejoró,
quizás algo se escapó.
Oigo tus lamentos, 
 aquellos sollozantes,
 amargos,
 impotentes,
 casi muertos.

Dolor punzante,
agonía constante.
La soledad carcome,
se vuelve insoportable
Caminas apartándote
 lentamente de mí.
Avanzando hacia tu
inevitable muerte.
Al abismo infame 
de la vanidad...




lunes, 8 de enero de 2018

Vietnam



Aún mi corazón, muerto,
te anhela y desespera.
Aún tus palabras son
mi fiel lumbrera.
Aún ruego tu perdón,
Vietnam querida.

No me apartes de esa unción;
tus manos prodigiosas protejan
mi sempiterna ilusión.

En el alba,
poesía exclamas.
En mis sueños,
la esperanza reclamas.

Entonces despierto,
entiendo…

Vanos mis deseos,
vanos mis lamentos,
vano es mi llorar
después de aquel
grave detrimento.

Doy cuenta ahora,
inefable criatura,
la oportunidad
ya no perdura.

Mi alma
con gran fragor
muere, se pierde.
Cayendo en la oscuridad,
lentamente,
desaparece.

Aún buscando sin hallar,
supongo que al
destino debo perdonar;
mas tu mirada
siempre he de recordar.














sábado, 6 de enero de 2018

МИРАЖ







Majestuosidad en una caída,
parece que perdida venías.

Oh dulce melancolía,
llena de alegría,
tu hermana ya
se aproxima.

Vestidura blanquecina,
besos fríos; mas no
gélidos como su alma.


¿Y si fuera ésta mi calma?
Aquella bella dama
que baja y me mira.
¿Y si su alma me llamara
al Seol; acaso mis pies
responderían?


Mas perdido, yo,
mi canto elevaría:
Oh vida suplicante,
comparte tu dicha
y transfórmame en tu mejor amante,
no sueltes mis manos,
que al Seol alcanzan,
tratando de salvar
a todos sus hermanos.

Oh vida mía,
llévame al comienzo
de la muy atribulada creación,
ese inicio lampo
lleno de la esperanza
y del amor.


Escape mis oídos
del más cruento fragor,
de estas voces , ya perdidas,

se oculte mi corazón.












viernes, 5 de enero de 2018

Poemas a la nada.

Ésta noche llorarán 
mis crueles ojos,
dispuestos a observar
tu más miserable muerte.

Oh mi pobre Elizabeth,
muerta estás

y lo hiciste sin más.
¿Debí escucharte?
No, debí actuar.
¿Debí ignorarte?
No, debí ayudar.
¿Debí odiarte?
No, debí amar.

Casi amada,
  casi perdonada,
   casi olvidada.

Morirás ahora,
me dice tu dadivosa soledad,
brindo mis labios
y susurro muy despacio:
ya muerta está
y nunca más volverá.